ALBERTO GOMEZ.
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Semblanza de RICARDO GARCIA BLAYA y PABLO TABOADA
publicada en la página webb TODOTANGO
CANTOR, AUTOR, COMPOSITOR
19 de junio de 1904 - 1 de mayo de 1973
Nombre real: Egidio Alberto Aducci
Apodos: El cabezón, El pingo de Lomas (puesto por Gardel)
Seudónimo: Nico
El éxito puede ser efímero, caprichoso, muchas veces
inexplicable, y esto ocurre frecuentemente en el tango, donde nos cuesta
entender el olvido o la trascendencia de sus protagonistas.
Alberto Gómez fue un cantor impecable, muy popular a través
de su participación en el cine argentino, dueño de una voz refinada y con
registro de tenor. Sin embargo su fama estuvo acotada al breve lapso de sus
películas, a su época de cantor. El tiempo lo fue marginando lenta, pero
implacablemente de la memoria popular.
Es cierto que buscó otros horizontes y también, como otros
grandes solistas de la década del treinta, los años cuarenta lo encontraron
recorriendo América Latina con un éxito extraordinario. Al igual que Charlo,
Agustín Irusta y Hugo del Carril, fue embajador del tango en todo el
continente.
Esta puede ser una explicación al misterio de su poca
trascendencia artística actual. Su ausencia del país en el renacimiento que
significó el cuarenta -década prolífica en músicos y vocalistas- es, a mi
entender, la causante de tan lamentable olvido.
Pero lo cierto es que estamos frente a un artista
excepcional que debe considerarse, por mérito propio, en la galería de los más
grandes vocalistas del tango, junto con Gardel, Corsini, Magaldi, Charlo e
Irusta.
Alberto Gómez tenía todo para ser primera figura, un
registro brillante, una voz potente, un gusto delicado y un excelente
repertorio.
Fue el cantor preferido de Enrique Santos Discépolo para
interpretar su obra. Su versión de "Alma de bandoneón" resulta
insuperable.
Fue cantor nacional, estribillista y solista, nunca cantor
de orquesta, por el mismo hecho de estar ausente cuando esta condición se
instituyó con las grandes orquestas.
Al igual que Gardel no fue un improvisado sino un estudioso,
desde niño sintió influencia por el canto lírico que estudió desde muy joven.
En 1927 comienza su carrera artística formando un dúo junto
a su amigo Augusto "Tito" Vila. Actuaron como aficionados en cafés y
teatros de Lomas de Zamora, su ciudad natal (región suburbana del Gran Buenos
Aires). Luego pasaron a los cines de la calle Corrientes, donde se unieron con
el consagrado guitarrista Manuel Parada, con quien debutaron en la radio.
La compañía Víctor los contrata y el primer disco que graban
tenía una etiqueta que no mencionaba a Manuel Parada, integrante del trío, ni
tampoco a Vicente Spina, que era guitarrista acompañante. Esto motivó el
alejamiento de Parada y la definitiva consolidación del dúo Gómez-Vila.
Su primer registro fue "Soy un arlequín" de
Enrique Santos Discépolo, que tenía en su acople el vals de Alfredo Pelaia
"Adiós adiós", en dúo con Vila.
Si bien Alberto Gómez grabó su repertorio mayoritariamente
acompañado por excelentes guitarristas, también realizó muchas versiones
acompañado por los músicos de la casa Victor e inclusive tuvo destacada
participación como estribillista de la Orquesta Típica Víctor y de Adolfo
Carabelli, cantando estribillos con el seudónimo de Nico.
En el año 1933 Alberto Gómez interviene en la recordada
película Tango, junto con otras grandes estrellas como Luis Sandrini, Libertad
Lamarque, Azucena Maizani, Mercedes Simone y varios más en la cual participa
como galán y como cantor.
Entre otras películas, en 1936 hace el rol protagónico de
"Juan Moreyra" y, en 1952, en el filme "Donde comienzan los
pantanos".
A mediados de los años 30, es requerido por las empresas
discográficos para actuar como solista. Gómez se niega, manteniendo su
compromiso con Augusto Vila. Al tiempo este renuncia al dúo, se convierte en
manager y así, nace su etapa protagónica.
Hace innumerables giras por el exterior, comenzando por
Uruguay, donde obtuvo un éxito consagratorio y también por Chile, Brasil,
México, Colombia, Venezuela y Cuba, lugares donde fue una y otra vez a raíz del
prestigio obtenido. Toda esta labor la realizó entre los años 40 y 50, aunque
siempre retornaba a Buenos Aires para cumplir compromisos en nuestro medio.
En la década del cuarenta graba con el sello Victor y luego
pasa al sello Odeon, pero son muchas y muy importantes sus grabaciones en Cuba
y en otros países de América. A fines de la década del cincuenta hizo
grabaciones en la compañía TK. Y en los años 1969-1970 grabó un larga duración
imperdible en la casa RCA-Victor.
Como compositor le debemos los tangos: "Del tiempo de
la morocha", "Tolerancia", "Que nadie se entere"
–grabado estupendamente por Francisco Canaro-, "Cansancio" y su gran
éxito "Que sea lo que Dios quiera" junto a su tema turfístico "Milonga
que peina canas", su obra más recordada.
Fueron sus guitarristas más destacados, los ya citados
Manuel Parada y Vicente Spina, Orlando Urruspuru, José Aguilar, Reynaldo
Baudino, Luis Iglesias, Remersaro y José Canet. Cantó también acompañado por Pedro
Maffia en el año 1959 por Radio Belgrano y en los discos TK.
El actual resurgimiento del tango nos obliga a difundir la
obra de Alberto Gómez, que está colocado en el nivel superior de las voces del
tango. Y como tangueros y hombres de radio debemos rescatar para las nuevas
generaciones su estilo, su personalidad y su extraordinario valor artístico.
fuente: TODOTANGO.
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