Un día como hoy... 1 de julio... pero de 1812...
el Primer Triunvirato, le encomendó al Deán Gregorio Funes que escribiera sobre todos los pormenores de la Revolución de Mayo.
Rememorando aquel día, (por Ley 25566 del 2002) se celebra en Argentina el día 1 de julio, el DIA DEL HISTORIADOR.
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DIA DEL HISTORIADOR
30 de Junio de 2013 | 21:14 hs.
PREGON, DIARIO DE
JUJUY
Por MANUEL ARMAS
Docente, vicepresidente del Colegio de
Profesores de Historia de Jujuy
En marzo de 2002 el Congreso de la Nación declaró el 1 de
julio como día del historiador para recordar y homenajear el esfuerzo que han
realizado y realizan los escritores, investigadores, profesores y aficionados
que se dedican al estudio, análisis y divulgación de los acontecimientos de
carácter histórico.
La fecha remite al día en que el Primer Triunvirato ordenó,
a través de un decreto de 1812, asentar por escrito los acontecimientos de la
Revolución de Mayo, con la finalidad de perpetuar la memoria de los héroes y
las virtudes de los hijos de América del Sud, y a la época gloriosa de nuestra
independencia civil. La tarea recayó en el Deán Gregorio Funes, quien a partir
de la documentación recuperada redactó el “Ensayo de la historia civil del
Paraguay, Buenos Aires y Tucumán”.
Preguntas como ¿para qué sirve la historia?, ¿cuál es la
función del historiador’, ¿desde dónde se cuenta la historia? son tan vigentes
como en el siglo XIX.
Los historiadores son personas curiosas, detectives que
buscan y encuentran en viejos libros y documentos e incluso en Internet, datos
del pasado. Una vez que lo hacen, los analizan para crear una imagen de una
época, un lugar o un evento que puede ser completamente extraño a la forma en
que pensamos y nos comportamos en la actualidad o puede explicar por qué
hacemos las cosas.
Los historiadores nos muestran los sucesos del pasado para
conocer a nuestros ancestros, sus esperanzas y sus luchas, los resultados de
sus políticas y economías, y los legados que nos dejaron, ayudan a quitarle los
mitos al pasado y a disipar las nieblas de la nostalgia y el romanticismo. Los
historiadores sirven como educadores, investigadores y curadores de museos;
pero también sirven en disciplinas específicas como el arte, la arquitectura,
la medicina, la ciencia y la literatura, expandiendo el conocimiento, también
trabajan como consultores en leyes, en el gobierno y en la preservación
histórica, enriqueciendo la comprensión y manteniendo el presente fiel al
pasado.
Pueden mostrar quienes fuimos, pero, aún más importante, nos
muestran las consecuencias de las ideas y acciones humanas. Son investigadores,
utilizando la ciencia y la curiosidad para entender el pasado, pero también son
artistas, tejiendo un cuento de experiencias humanas.
El historiador sabe que no todos saben lo mismo, que no
todos dicen lo mismo, que no todos creen lo mismo. Es por eso que recopilan
datos y relatos. ¿Para qué? Para poner en orden las informaciones y para contar
las cosas con la mayor imparcialidad y erudición posible. Usando el máximo de
rigor, ellos nos permiten tener una visión fundamentada del pasado y nos hacen
descubrir que la realidad humana está sometida a factores diversos; que no hay
una causa que todo lo explique que hay una parte previsible en el comportamiento
individual y colectivo y que hay un lado azaroso, impredecible, en los actos
humanos.
fuente: PREGON, DIARIO DE
JUJUY
MANUEL ARMAS , Docente, vicepresidente del Colegio de
Profesores de Historia de Jujuy
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