miércoles, 15 de mayo de 2013

LOS ESCRITOS DE ROLANDO... PELUSA Y EL TANGO...65

La Mesa del Café - Folklore
Rolando Moro - 7-6-2012
publicado en la página webb TODOTANGO.


Pulpero don Rolando  07/06/2012 


Vea payador amigazo OSCAR.

Andan todos por allí desparramados como bigote de indio. El Fernando tiene los ojos finitos como puñalada en tarro, Ud. mismo da vueltas desorientado buscando el estuche de la guitarra, Bonguito olfatea todos los olores que dejaron tantos músicos…..¡¡Fiestón y pico el cumple de la payadora!!

Miguel vino a comer el pucherazo, junto a otros amigos y ahora sin ganas y lentamente se van poniendo las cosas en su lugar.

Hasta que vuelva el hambre en todos y nos pongamos nuevamente en movimiento para que hablemos de los toros y las vacas, en la mesita del fondo contaré a las Paisanas Graciela y M.V., el porqué tenemos pertenencia a la tierra y la amistad.

Recordará M.V. budines y flanes de otros tiempos y de aquella parada de mano que le dejó chichones que aun conservará. Graciela a campos abiertos y poesías de las que tanto oyó hablar. Ahora voy hasta el pueblo vecino a traer “Chicharrón cuí” para la nueva horneada de pan y luego les contaré.



Dos horas de polvoriento camino bastaron para alejar aquel “niño-joven” de sus árboles, baldíos, pájaros y la modorra pueblerina de su infancia. Depositado entre sonidos forasteros, no dormía- diareroooo-, leche fresca y el retumbar de herraduras sobre empedrados, ahuyentaban las imágenes de la abuela buena acariciando su cabeza en noches largas.

Caravana de imágenes, movimiento continuo, ruidos de motores, fueron arrastrando las vivencias a tiempos nuevos, distintos colores y olores iban creando alboradas distintas que se debían amansar de cero. Olfateando afectos, la ronda llegaba a pocas cuadras antes de volver al terreno de añoranzas, para reiniciar a la otra tarde después del cuili.

Fue un sábado de siesta, cuando desde un tronco donde los encontré sentados y charlando pico a pico, me contestaron, yo soy Cachito y él es Pelusa.

Comenzaba a “enderezar” mi anemia afectiva. “Cambá timbocá”, figuritas, trenes, naipes y todo un mundo de pasatiempos, a los que rápidamente les tomé de la cola evitando chusquéen.



Cachito tenía en doña Argentina (veterana docente), la madre más solicita y amante que se puede encontrar, ella, desde bebe lo acunó en sabanas de afectos, comprensión y calor de hogar, cuando la vida apuntaba hacia calvarios de frío y empedrados. Pelusa se sentaba en mesa de trabajadores y luchas sindicales.

La noria del tiempo fue volcando horas al riego de la vida y los caminos fueron abriendo destinos cardinales. Cachito- siempre dormido y con borceguíes-tomaba el mismo cole que nos llevaba a Córdoba, desde donde por ideales, nunca más vería el camino largo del regreso.

Pelusa, quien amaba la guitarra y el chamamé, un día comenzó a portar otros instrumentos que producían sonidos pero que no atinaban con melodías. Ezeiza y cien bailes lo llevaron un día conocer gran parte del país desde ventanas duras.

La noria seguía repartiendo horas, semanas y años a la campiña. Fue un día en que por cosas del destino, la varita de la suerte dispuso que volviera a ver la alborada y los amados caballos.




Arrepentimiento de unos, figuración y convicción de otros, permitieron que se radique en Colonia Benitez. Casa vieja que antes había funcionado de almacén, salón de esquina y dormitorio, patio enorme y desorden generalizado. Libros apilados por doquier, guitarras, equipo de sonido y rasgo de modernidad en una PC.

Fuente de amistad de donde beben poetas, artistas, músicos y aquellos de fierro desde siempre-MÁS BUENO QUE LA TETA-, fue como lo definió un conocido poeta nacional.

HERMANO, no dejes de venir a enseñarme y contarme de tangos que quiero aprender, son sus palabras casi semanales. Autor de 17 libros y muchos chamamé.

Comidas, mate y vino en hectolitros, jalonan las horas de amistad, tiempo útil, sin desperdicio, atesorable e inolvidable.



Presentación de la delegación Chaqueña en Cosquín, glosas, poesías y atuendo casi fundido en sus carnes. Bombacha campera, pañuelo al cuello, corralera y sombrero retobado al frente con barbijo. Cabellera larga y poco cuidada que las nieves cubrieron por completo, nos encontró en el festejo posterior. A mi regreso quedó dormido en su mesa de país solitario, sólo una nota que prometía….Pasado mañana vengo a contarte de un maravilloso tanguero y mejor persona, ALBERTO PODESTÁ.

Su nombre es Alejandro Washington Alé, nació………………………………………………………………………………………………………………Sigue cantando aun hoy, su versión……………………..

¡Gracias hermano, me emocionan estas cosas!



Al mes siguiente saliendo de SADAIC junto al amigo y poeta Jorge H.(El Alemán) que vive en Santa Fe, se cruzan al bar de enfrente haciendo tiempo. Al entrar ven en una mesa a Alberto sentado con cuatro amigos, ¡¡ese es Alberto Podestá dijo Jorge!!

¡¡Vamos a hablar con él!! sos loco nos no va a dar pelota, vamos, cuando lo volveré a ver.

Jorge se sienta en una mesa y Raulito Junco (Pelusa), con su larga cabellera, sombrero retobao y ropas gauchas, avanza hacia la mesa del notable artista diciendo….¿Perdone, Ud. es Alberto Podestá?, vengo del Chaco y quiero hablar con Ud.

Podestá se levanta y antes que Pelusa pueda agregar algo más le dice….¡¡Déjeme darle un abrazo!!

Recién allí Pelusa comienza a contarle que tiene un amigo que le habla de él y la maravilla de su obra y trayectoria. Nuevamente ALBERTO PODESTÁ en forma nerviosa pide un papel para escribir algo, como nadie poseía uno en ese momento, el compañero de mesa de apellido Duplaa, dueño del salón bailable “SIN RUMBO”, le da una de sus tarjetas y escribe…..” Al Dr.Rolando Moro le envío un gran abrazo de su amigo para siempre, ALBERTO PODESTÁ”

Uno, artista genial de inigualable humildad, otro, amigo poeta, payador, amante de los caballos y costumbrista, luchador de los derechos del pueblo, constituyen parte del tesoro que hace que la vida merezca ser vivida.

Cariños 

La Mesa del Café - Folklore
Rolando Moro - 7-6-2012
publicado en la página webb TODOTANGO.

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