......................................
Nombre completo: Vaccarezza, Bartolomé Ángel Venancio
POETA, AUTOR TEATRAL
Siendo secretario de un juzgado le dio por llevar al papel
los personajes que a diario trataba, naciendo así su primera obrita, "El
Juzgado", que estrenó Mario Perelli y su conjunto filodramático en el
salón "Il Resorgimiento", del barrio Villa Crespo, el 20 de marzo de
1903. El mismo cuadro de aficionados le estrenó después: "La Noche del
Forastero", "Los Montaraces", "Para los Gauchos,
Querencia", "Yerba Mala", "Las Peras", "Los
Ultimos Gauchos", hasta que en 1911 el empresario del teatro Nacional, Don
Pascual Carcavallo, realiza un concurso al que se presenta con "Los
Scruchantes", obteniendo el primer premio y representándolo allí por
primera vez el 1° de julio de ese año.
Sus obras suman doscientas, casi todas sainetes, dadas con
el más ruidoso éxito por las principales compañías y algunas, como "El
Conventillo de la Paloma", de siempre grata recordación.
Es justicia recordar los títulos de muchas de ellas,
incluyendo aquellas que se apartan del género criollo: "Barro
Blanco", "Teatro Criollo", "El Comité", "Doña
Remedios", "Función y Baile", "Las Ferias Francas", "El
Cabo Rivero", "La Gente Guapa", "La Cabaña", "La
Ley Palacios", "Comercio Chico", "Un Baile en la
Batería", "Los Reservistas", "El Ultimo Gaucho",
"Triunfo Radical", "Los Novios de Genoveva", "Pancho
Varela", "Casa de Juego", "La Casa de los Batallán",
"El Fortín", "Palomas y Gavilanes", "Las Chicas de
Gurruchaga", "Cuentos Cortos", "Los Hijos del Finao",
"La Otra Noche en los Corrales", "Verbena Criolla",
"El Barrio de los Judíos", "La Fiesta de Santa Rosa",
"Chacarita", "Cortafierro", "En la Escuela de los
Zonzos", "Juancito de la Ribera", "El Cabo Quijote",
"Los Cardales", "Lo que le pasó a Reynoso",
"Conventillo Nacional", "Sunchales", "San Antonio de
los Cobres", "Tu Cuna fue un Conventillo", "Murió el
Sargento Laprida", "A mí no me Hablen de Penas", "Cuando un
Pobre se Divierte", "El Camino a la Tablada", "El Cambalache
de la Buena Suerte", "El Conventillo del Gavilán", "El
Conventillo de la Paloma", "El Corralón de mis Penas", "El
Fondín de la Alegría", "El Teniente Peñaloza", "Juan
Moreira", "La Comparsa se Despide", "Las Quinielas",
"La Vida es un Sainete", "Por la Calle va la Vida",
"Los Pequeros", "Soy el Payaso Alegría", "Todo el Año
es Carnaval", "Una vez en un Boliche", "Villa Crespo",
"Ya se Acabaron los Criollos", "El Arroyo Maldonado",
"El Buey Corneta", "Entre Taitas Anda el Juego", "Todo
Bicho que Camina va a Parar al Asador", "Va Cayendo Gente al
Baile", "La China Dominga", "Contreras y Barraganes",
etc.
Fue en todo momento un notable hombre del teatro argentino
pues sumaba a sus virtudes de primer sainetero la del mejor autor teatral
nuestro; como gremialista la Casa del Teatro y la Sociedad General de Autores
(Argentores) tuvieron bajo su presidencia los períodos de máxima prosperidad.
Poeta criollo, estaba apegado a las tradiciones nativas,
siendo muy buenos sus consejos que recogieron con su voz micrófonos de la
radiotelefonía porteña y sus libros "Dijo Martín Fierro" y
"Cantos de la Vida y de la Tierra".
Escribió las letras de canciones y de muchos tangos para ser
cantados en sus obras y, porque siendo sainetero, era tanguero de ley. Se
inició con "La Copa del Olvido", en 1921, para "Cuando un Pobre
se Divierte", y al que agregó, recordando los que grabó Carlos Gardel por
ser el motivo de este trabajo, "Talán...Talán", "Araca,
Corazón", "Padre Nuestro", "Otario que Andás Penando",
"Francesita", "No le Digas que la Quiero", "Adiós que
te Vaya Bien", "Eche Otra Copa Pulpero", con músicas de Enrique
Delfino; "Adiós para Siempre", "No me Tires con la Tapa de la
Olla", "El Poncho del Amor", con músicas de Antonio Scatasso;
"El Carrerito", con música de Raúl de los Hoyos.
También "Botines Viejos", "Atorrante",
"Villa Crespo", "Julián Navarro", "Calle
Corrientes", "Con Toda el Alma", "La Charlatana"
(ranchera), "Muchachita Porteña" (vals), "El Cornetín del
Cuarteador" (milonga), y tantas otras, que con músicas de Filiberto,
Farini, Mores, Canaro, Iriarte, etc., pasaron a ser, varias de esas canciones,
inolvidables para el pueblo todo.
A Gardel y a Razzano los conoció en los primeros escarceos
por los teatros y a medida que el ambiente los fue acercando, iba uniéndolos
una amistad entrañable que solo la muerte pudo cortar. En sus primeros discos,
ya el dúo necesitó de sus versos, para enriquecer su repertorio, al grabar como
estilo sus décimas "A mi Morocha".
En un viaje que hiciera a Europa no pudo estar ajeno a los
triunfos de Gardel en París, donde además de aplaudirlo, gozó de su
compañerismo.
Cuando fueron repatriados los restos del cantor, él fue
designado por la comisión de homenaje para despedirlos al ser colocados en el
Panteón de Artistas de la Chacarita hasta tanto se construyera el mausoleo.
Tuvo aquel discurso el carácter de una verdadera elegía al zorzal y mucho de
intimidad, dada la vinculación que hubo entre ellos en materia del arte criollo
y popular en el cual ambos fueron ganadores.
Ese día envió, para acompañar los restos de Carlitos hasta
la Chacarita, una carreta nativa tirada por bueyes y conducida por verdaderos
gauchos.
Aportó al cine criollo los argumentos de: "El
Conventillo de la Paloma", "El Cabo Rivero", "Lo que le
Pasó a Reynoso", "El Comisario de Tranco Largo", etc. y escribió
para la radio también.
En el alma del pueblo penetró «con enorme intuición, con una
capacidad de captación pocas veces alcanzada, la entraña popular, en lo que
tienen de pintoresco, las barriadas porteñas con sus personajes del hampa y del
malevaje, y la vida de los conventillos, que reflejó con pinceladas certeras,
sin acritud, pasando por alto lo que esta vida tiene de tragedia y de miseria,
para detenerse en el pintoresquismo fácil y entrador".
Vacarezza nació en Buenos Aires (Almagro) el 1° de abril de
1886 y allí falleció el 6 de agosto de 1959.
fuente: TODOTANGO.
...................................
No hay comentarios:
Publicar un comentario